Caso clínico
Paciente de 48 años con diagnóstico de hipertensión arterial (HTA), diabetes Mellitus (DM) tipo 2, obesidad e hiperuricemia
Autor: Novartis
La HTA es uno de los factores de riesgo más importantes de la morbilidad y mortalidad cardiovascular.
La prevalencia oscila entre un 20% y un 47% de la población mayor de 20 años.
La importancia de la presión arterial alta como factor de riesgo de la enfermedad cerebrovascular, la enfermedad coronaria, la insuficiencia cardíaca y la insuficiencia renal ha sido demostrada en múltiples estudios epidemiológicos. Además, los enfermos hipertensos tienen más a menudo otros factores de riesgo cardiovascular asociados, lo que provoca que el riesgo cardiovascular global sea más alto.
En la estratificación del riesgo cardiovascular, el fumador o ex fumador de menos de un año está considerado como un factor de riesgo mayor.
En la estratificación del riesgo cardiovascular, el fumador o ex fumador de menos de un año está considerado como un factor de riesgo mayor. El cese del hábito tabáquico se considera una medida fundamental para reducir el riesgo cardiovascular y prevenir o frenar la progresión de las complicaciones de la DM 2.
Consumo diario de 20 cig./día. Edad de inicio: 16 años. Ha realizado tres intentos previos para dejar de fumar, todos sin tratamiento farmacológico ni ayuda terapéutica. En el último intento se mantuvo 8 años abstinente y ahora lleva 4 años fumando de nuevo. Test de Fagerström: 4, y Test de Richmond: 10. Cooximetría inicial: 15 ppm. Paciente altamente motivado, pero ahora se siente incapaz de realizar la deshabituación sin ayuda.
Acudí a mi doctora a buscar los resultados de la revisión del análisis de sangre y me envió a la enfermera para el control de todas las patologías crónicas que tengo. Mi enfermera también es quien lleva la consulta de tabaquismo en el centro de salud y fue muy clara conmigo. Me dijo que tenía mucho trabajo por hacer: perder peso, dieta para la HTA, DM y hacer ejercicio físico, pero que lo que más podía beneficiarme es dejar de fumar cuanto antes. Me ofreció ayuda y así lo hice. Decidí poner todos mis esfuerzos en dejar de fumar y posteriormente centrarme más en el resto de cambios.
Me ofreció ayuda y así lo hice. Decidí poner todos mis esfuerzos en dejar de fumar y posteriormente centrarme más en el resto de cambios.
Empecé el tratamiento con parches de 21 mg. Yo no creía mucho en la eficacia de los tratamientos porque siempre había dejado de fumar sin ayuda, pero esta vez hice caso a la enfermera y me puse el primer parche la noche anterior al día D. Me levanté un poco nervioso porque tenía un poco de miedo a no saber si notaría algún síntoma con el parche.
Cuando ya llevaba unos 20 días sin fumar yo ya no quería utilizar más parches, pero la enfermera me recomendó hacer el tratamiento completo, así que utilicé durante 28 días los parches de 21 mg, 28 días más los de 14 mg y después los de 7 mg hasta completar los 3 meses. Me dijeron que podía utilizar chicles o comprimidos de nicotina con el parche, pero no llegué a comprármelos.
Me ofrecieron la posibilidad de poder asistir al mismo tiempo a un grupo de deshabituación, pero no acepté porque soy una persona poco sociable.
Mi mujer fuma, al principio quiso dejarlo conmigo, pero después se echó atrás y todavía no lo ha dejado, pero no fue un impedimento para mí que ella continuara fumando, porque yo lo tenía claro y ya había tomado la decisión de dejarlo. Ahora llevo 2 años sin fumar y no lo echo de menos. Sé que el tabaco me estaba quitando años y calidad de vida, tomé la decisión correcta y espero mantenerme lo que me quede de vida sin fumar.
La primera visita creo que fue decisiva, el paciente acude a la consulta con muchos cambios pendientes de realizar en su estilo de vida, que analizamos con detenimiento, y dejar de fumar era la estrategia que más impacto ejerce en la reducción del riesgo cardiovascular de todas las enfermedades crónicas que padece.
Segundo objetivo: aceptar el tratamiento farmacológico. Se mostró muy reacio al inicio y durante todo el tratamiento, pero aseguraba seguirlo correctamente.
Se trata de un paciente poco cumplidor, no se preocupa por su salud, no le gusta acudir a las visitas de seguimiento, e intentamos pautar las mínimas para garantizar el cumplimiento y posteriormente seguíamos en contacto telefónicamente.
Actualmente sigue abstinente y pendiente de modificar el resto de conductas: dieta, ejercicio físico, pérdida de peso.
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