El tabaco y una experiencia de prevención universal dirigida a alumnos de sexto curso de educación primaria

Autor: Vázquez, Rosa Suárez

Las encuestas más recientes sobre consumo de drogas dirigidas a población adolescente señalan el intervalo de edad de entre 11 y 12 años como aquel en el que se produce el inicio en el consumo de tabaco para la gran mayoría de chicos y chicas fumadores. Partiendo de esta realidad, las acciones de prevención universal para tratar de retardar esta edad deberían iniciarse en edades inferiores.

Estas encuestas también tratan de analizar los motivos que la mayoría de encuestados/as señalan como determinantes para iniciar el consumo y los resultados ponen de manifiesto que el consumo por parte del grupo de iguales es el principal de ellos.

El curso de sexto de primaria agrupa a chicos y chicas de 10 y 11 años. Se trata del alumnado que se encuentra en el curso anterior a la educación secundaria y que coincidirá con el inicio de la etapa adolescente y la convivencia con chicos y chicas mayores, quienes constituirán el principal modelo de referencia.

La acción universal específica denominada El tabaco y dirigida al alumnado del curso de sexto de primara tiene por objetivo la implicación y participación de toda la comunidad escolar (familias, profesorado y alumnado). El proceso de intervención consta de una sesión inicial en la que el técnico en prevención ofrece información básica a los alumnos sobre el tabaco y propone los temas de debate y reflexión para que la clase, dividida en grupos de aproximadamente cuatro personas, elija aquellos que susciten su interés (Tabaco y… amigos, Tabaco y… familia, Tabaco y… la ley, Tabaco y… salud, Tabaco y… deporte, Tabaco y… diversión, etc.). Posteriormente, los grupos de alumnos con apoyo del profesorado reflexionan sobre el tema elegido y plasman sus ideas en forma gráfica, escrita o mediante una representación. Una vez finalizadas las propuestas, se convoca una sesión para las familias de los alumnos con una primera parte en la que el técnico reflexiona sobre el papel de la familia en la prevención del consumo de tabaco y, especialmente, en aquellas familias en las que existe consumo. En la segunda parte, los alumnos presentan sus creaciones y finalizan la sesión con una merienda saludable con productos naturales aportados por las propias familias.

Al cabo de uno o dos meses, el profesorado realiza una acción complementaria de refuerzo a fin de clarificar nuevamente los conceptos básicos y los riesgos del consumo y favorecer el compromiso de no consumo del alumnado.

La experiencia nos demuestra que este tipo de acciones, aunque son puntuales y en ellas técnicos y profesorado se complementan en la puesta en marcha de una acción preventiva, son eficaces, ya que consiguen favorecer la reflexión y la idea de que la prevención es una tarea conjunta.

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